Estudio INA 1 . 2 . . observaciones 1 . 2 . 3 . . planicie . . ley de humedales . 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . . Salida Luján 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . . Parque Industrial 1 . 2 . 3 . . Larena . . Aliviador . . Vinculacion . . Pilará 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . . causa Pilará 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . . planEscobar 1 . 2 . 3 . 4 . . Ord 727 1 . 2 . 3 . . Consultatio 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . 11 . 12 . . altimetrias . . San Sebastián 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . 11 . 12 . 13 . 14 . 15 . 16 . 17 . 18 . 19 . 20 . 21 . 22 . 23 . 24 . 25 . 26 . 27 . 28 . . embalses . . EIDICO . 1 . 2 . . mentiras . . quantum . . El cazal EIRSA 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . . La Cañada 1 . 2 . . humedal Escobar 1 . 2 . 3 . . Cartas Doc a Scioli . 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . . miserias . . cartas doc al OPDS 1 . 2 . 3 . a la AdA . al Juzg Fed 1ºSI . al Fiscal Federal . a Sergio Massa 1 . 2 . . a Zúccaro 1 . 2 . 3 . . a Arlía . . a Alvarez Rodríguez 1 . 2 . 3 . . a otros . . atropellos 1 . 2 . 3 . 4 . . playboy . 1 . 2 . . puertoescobar 1 . 2 . 3 . 4 . . areco . . cloaca 1 . 2 . . causa 2843 JF1SI 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . . Colony Park 1 . 2 . . preguntas 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . . respuestas . . remediacion . . recusacion . . amicus . . propuesta 1 . 2 . . terraplen . . jurisprud . . archivolegislativos . . hidrolinea 1 . 2 . 3 . 4 . . . art 59 . . Res.29/09 . . eiaydia 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . . Valls . . parentescos . . contralor . . salvedades . . IAB . . flujo termodinámico 1 . 2 . 3 . convenglish . . plataforma 1 . 2 . . termodinamica 1 . 2 . 3 . . riovivo . . riomuerto . . mantos . . sedimentología . . acuíferos . . puelches 1 . 2 . . albanueva . . sustentable. 1 . 2 . 3 . 4 . 5 . 6 . 7 . 8 . 9 . 10 . 11 . . agua 1 . 2 . 3 . . pendientes 1 . 2 . . Luján . 1 . 2 . 3 . maná del cielo 1 . 2 . 3 . . ensanche . 1 . 2 . 3 . . Zanjón Villanueva . 1 . 2 . 3 . . garin . . cantón . . las tunas . . ley particular . . emergencias . 1 . 2 . inundate . 1 . 2 . 3 . 4 . . colinacarmel . . carmel . . Comilú . 1 . 2 . 3 . . comireclu . . otamendi . . Verazul . 1 . 2 . 3 . . Anibal . . jubileo . . index

Aníbal

Ver más intercambios con Anibal por /ensanche3.html

HOLA FRANCISCO:

Desde hace tiempo venimos haciendo en el Econáutico una serie de investiga ciones y ensayos técnicos varios, para perfeccionar un sistema que le permita, a cada casa flotante, clarificar y potabilizar su propia agua de red y de consumo; sin utilizar cloro ni flúor ni ningún otro químico y sin producir alteraciones perjudiciales al entorno.

Eso nos llevó a aprender unas cuantas cosas que me parece interesante compartir contigo; porque aportan datos de las actuales condiciones del agua del Luján en este lugar. Como así también sobre las aguas del Querandinense y, sobre todo, la profundidad a la que se encuentra la tapa superior que sella ese manto de agua marina.

En otro asunto importante, ya hemos logrado un sistema para tratar los efluentes en cada casa, sin utilizar ningún químico, ni volcar aguas contaminantes al río. Por medio de un circuito de 4 etapas de biodigestión anaeróbica y natural muy eficaz, obtenemos un agua excelente para el riego de frutales, en el huerto orgánico de cada jardín…

Te adjunto uno de los informes del análisis del agua que hemos tomado en el centro del canal, a unos 350 m de la costa del Río Luján. Si bien es agua que entra desde el río Luján, hay que tener en cuenta que las costas blandas, que están cubiertas de plantas típicas del humedal, sumadas a las plantas acuáticas que tratamos de mantener lo más posible en los sectores de los espejos de agua donde proliferan, y a la incidencia de los rayos UV del sol, es probable que modifiquen algo y mejoren la calidad del agua que trae el río.

A simple vista se advierte que dentro del canal el agua es más limpia y tiene menos sedimentos que la del río. Lo cual es lógico dado que al entrar a nuestro canal, el agua se desacelera y deposita una parte de los sólidos que transporta.

Es interesante también observar el proceso de ingreso y egreso del agua que normalmente se produce por cambio de mareas, cuatro veces por día. Pero que está sujeto a eventos ocasionados por los vientos que producen fuertes bajantes o poderosas crecidas (que inundan por completo nuestros jardines, como debe ser). Luego te enviaré también los otros informes del laboratorio que completan el estudio de las características del agua en este lugar.   

A no ser por la presencia de hierro, el análisis físico químico del agua del canal muestra que no se encuentran metales pesados ni otros elementos tóxicos de importancia. Pronto tendremos también, para poder enviarte, los últimos resultados del análisis bacteriológico; pero ya sabemos que no presenta signos de contaminación grave. O sea que el agua, al menos en este lugar, milagrosamente y en contra de lo que uno podría suponer-, se encuentra todavía en muy buenas condiciones!

Este es un dato muy importante; porque modifica la visión que tenemos acerca del agua del río. Es un bien natural que aún no ha sido totalmente arruinado y que, por lo tanto, vale más la pena cuidar. No es una perspectiva menor la que nos aportan estos datos técnicos, en la postura a sostener frente al avance insensible de las urbanizaciones estilo “Muertos del Lago”.

Cuando todo está podrido y supercontaminado: “qué le hace una lancha más al Tigre…!” Pero si podemos demostrar que, por lo menos en este tramo del cauce, el Río Luján tiene todavía agua sana, entonces existe un valor natural evidente que no se debe permitir que sea destruido. Y que si aún así se lo degrada, podremos dar testimonio de la causa y el momento en que ese daño se produzca. Seguramente con tus conocimientos en materia de aguas, podrás evaluar con mucha más claridad si lo que yo apunto, desde mi absoluta ignorancia, es correcto o no…

Entre las exploraciones e investigaciones que venimos haciendo en muchos temas, hicimos recientemente dos pozos con encamisado, para analizar el agua salobre y también el agua dulce cercana a la superficie.

Los resultados nos llevaron de vuelta a confirmar lo que yo siempre intuí y es que, habiendo tanta agua superficial, es innecesario sacar agua por medio de perforaciones. Pero en este proceso, la investigación nos aportó varios datos muy interesantes.

Según testimonia una familia de 3 generaciones de poceros de la zona, hace años, el antiguo dueño de la arenera de Ruta 26 y Río Luján, de apellido “Esnaider” (así lo pronuncian todos por aquí), se propuso encontrar agua dulce de pozo. La perforación que se hizo entonces, superó largamente los 200 metros, antes de que Esnaider se cansara de probar agua salada y abandonara su intento.

Todos los que saben, opinan que aquí no hay agua dulce ni aunque venga Julio Verne y haga el viaje al centro de la Tierra. Sin embargo hay testigos que aseguran que, antes de la instalación de la pequeña planta de Aguas Argentinas (hoy AYSA), el pueblo de Dique Luján se abastecía de agua dulce de buena calidad que provenía de un pozo profundo, realizado cerca de la Parroquia, (de ahí vendría el milagro…?) y ese agua era distribuida por un camión tanque que recorría el pueblo haciendo el reparto de agua potable.

Lo que nosotros podemos aportar es que hicimos, con todos los cuidados de no contaminar, un pozo encamisado a 90 m de profundidad y obtuvimos agua de mar muy salobre.

Por otro lado, yo quise investigar también la extracción de agua dulce filtrada por el humedal, y realizamos un freatímetro. Es un pozo poco profundo en el que se coloca un caño ranurado y una bomba sumergida; para extraer el agua de las napas. En ese experimento, llegamos a 12 metros por debajo del cero IGM, sin encontrar agua salobre. Ahí el experto pocero se detuvo, al encontrar señales de que si seguíamos profundizando, comenzaría a aparecer el agua salada. Pero el análisis del agua de las napas no nos dio mejor que el agua que tenemos en la superficie del canal. Encontramos que tenía incluso un poco más de bacterias y mucha concentración de aluminio; por la arcilla del terreno.

Bueno, querido, te comparto todas estas exploraciones que venimos haciendo, como un humilde aporte a tus incansables trabajos. Todo parece indicar que en este sensible lugar que se encuentra cada vez más encerrado por los mega emprendimientos, todavía la Naturaleza se mantiene en estado sano. Algo que tenemos que lograr que no sea arrasado…

Un gran abrazo! Anibal

 

Querido Anibal, te agradezco esta información de Tus esfuerzos por conocer algo más del lugar que amás.

Paso a responder algunas de Tus inquietudes desde lo que está a mi alcance presuponer.

En primer lugar, si tomamos nota de las advertencias que nos regala José Luis Cavallotto, honestísimo estratigrafo deltario sobre los aportes de löss fluvial que baja el Paraná, éstos rondan en unos 20 cms por siglo.

Los aportes que por cordones litorales ha dejado la cuenca del Escobar durante los últimos 1500 años los tenés a la vista en sus perfiles bien contrastados entre sus respectivos senos y en los perfiles transversales, que en superficie aparecen más suaves que en los profundos. Así por caso, en el iforme de hidrogeología aportado por Werner para los EIA de Puertos del Lago acreditan la tapa de Puelches a 11 y 12 m cerca de las barrancas. Desciende a unos 14 m y alcanza los 17 al llegar al borde del cauce del Luján.

Esto no es lineal, al punto que el Dr Jorge Santa Cruz, titular del Depto de hidrogeología del INA localizó al Puelches a 90 m en la zona de Campana o Zárate (confieso no recordar bien ese lugar, pero es sencillo preguntarle).

De todas maneras, el manto sedimentario que crubre al Querandinense no debería superar donde están Uds los 3 m. (1500 años)

La perforación a 12 m con respuestas de agua dulce, de la que referís resuelta con camisa ranurada, me hace pensar que esas ranuras no están presentes en el cruce del Querandinense; o que el gravado que siempre se realiza para evitar las comunicaciones verticales alrededor de la camisa, selló esa comunicación.

En las cavas fotografiadas a baja altura en San Sebastián, San Gabriel y Puertos del lago se advierten con claridad las arenas Puelches y el acuitardo que por encima lo protege. El tema es cómo llegar a esas arenas de 2,5 millones de años sin contaminar sus aguas con los mantos superiores.

El gravado que se realiza alrededor de las camisas, es en el mejor de los casos, una cuestión muy precaria. He visto media docena de veces cómo lo realizaban muy acreditados poceros recomendados por Vázquez, un viejo maestro pocero de Garín ya fallecido hace años, y a pesar de que siempre los recomiendo y estoy encantado de los dos pozos que hace 37 y 20 años me realizaron (uno de 20.000 l/h y otro de 13.500), el tema del gravado me resulta superdeficitario.

Uno de ellos es Juan Carlos Ferrari y ha hecho trabajos para el INA y para medio mundo en toda la República. Tiene una experiencia enorme y es muy apreciado.

Suele encarar los trabajos haciendo un cateo de los mantos antes de darse a perforar para la camisa y evita ir mucho más allá del techo del Puelches para evitar arrastrar sedimentos del hipopuelches (arcilla azul). Ha realizado muchas perforaciones en brazos interdeltarios y planicies intermareales con los resultados que son de imaginar. Dezconozco si alguna vez encontró una veta afortunada. Pero nunca me comentó de milagros. Esto es lo que tengo para comentarte sin demasiada reflexión sobre los cloruros y sulfatos que hacen inviable el consumo de agua en zonas deltarias.

Te acerco unos vínculos: http://www.delriolujan.com.ar/acuiferos.html Ver el breve informe del geol. Zilli.

http://www.delriolujan.com.ar/puelches.html Aquí el Ing Carlos Mazzei nos señala:

Sin duda que todo lo que esté por debajo de los dos metros de profundidad, muchas veces resulta "tan oscuro de entender como el realizar un viaje más allá de la Luna". Ver gráficos al final del hipertexto

http://www.delriolujan.com.ar/puelches2.html En éste hago balance: Recorriendo la bibliografía de atentados hidrogeológicos es imposible encontrar algo comparable a los estragos de acuicludos y acuíferos en la llanura intermareal. Ya no se trata de evaluar permeabilidad, valor de gradiente de altura o de nivel piezométrico, valor de la conductividad hidráulica, dispersión, difusión, disolución/precipitación, adsorción/ desorción, intercambio catiónico y otras variables que asisten la predicción del transporte de contaminantes.

La interfaz suelo/acuífero ha desaparecido. Así también la interfaz aguas superficiales/Puelches; que en adición ha potenciado su interrelación por flujos convectivos internos; así lo confiesa el propio García Romero a cargo de las lagunas de Nordelta. No hay barreras reactivas, todo ha desaparecido. Y no precisamente por erosión natural.

La protección natural desapareció en toda su extensión para dejar al Puelches en miles de hectáreas por completo descabezado y ¡ninguno de estos ingenieros lo advirtió!

http://www.delriolujan.com.ar/sedimentologia.html Aquí encontrarás un informe del Prof. Mario Verandi.

 

Respecto a flujos superficiales ya sus trascendencias son interminables. Pero veré de instalarme donde más oscuro veo.

Cuando Tú dices que el agua entra y sale 4 veces por día, lo que no me dices es si entra por arriba de la columna, por el medio, por debajo o más o menos parejo por toda la columna.

Hay algo que te quiero expresar. No concibo una gota de agua en estas áreas, que a excepción de agua de lluvia se mueva o promueva energía “hidráulica”. Te hago este planteo radical para intentar sacarte del ojo mecánico con que todos miramos estas cuestiones.

Los sistemas convectivos que vienen de los cuerpos tributarios acarrean más cargas que los que vienen de los cuerpos receptores a través de las energías mareales. Guardan hipersincronicidad mareal y conservan siempre las memorias de sus tránsitos grabadas en los fondos. Por ende, me doy a suponer que las aguas que entran a Tu canal lo hacen por arriba; con poca carga sedimentaria y de ahí su claridad.

Hacer análisis de aguas superficiales sin considerar éstas y otras disociaciones aún más insospechadas, es jugar a la lotería. Pero si quieres comprobar cuán serias son estas diferencias, acércate a la boca del Zanjón Villanueva y en horarios de flujos en descenso toma muestras en distintos puntos de la columna de agua y a no menos de 3 o 4 m de la orilla.

Para ello tienes que prepararte un palito largo con otro vertical que porte la escala de inmersión en cuyo extremo inferior habrás colocado un frasquito con una soguita que le abra la tapa y un resorte que la cierre. Verás qué interesantes diferencias encontrarás y cómo irás prestando atención a pulir estos instrumentos.

Te acerco imágenes de la salida del zanzón para que adviertas el nivel bruto de disociaciones que encontrarás en esa boca de salida. Mira la primera imagen de este http://www.delriolujan.com.ar/zanjon3.html

No se te ocurra sacar depósitos del fondo porque te infartás.

Pero lo que vale es que hagas comparaciones con otros que hayan hecho estas observaciones a su manera y verás qué complicado es hacerlas sin antes pulir los criterios y lugares precisos de sus capturas.

Otro detalle: la latitud del sistema vertical depende de las diferencias de temperatura. (Aunque no estimo vale mentar estas situaciones en un curso de tan poca profundidad). En plataformas marinas desde el final del otoño a comienzos de la primavera es cuando se manifiestan en superficie las floraciones (bloomings). Nutrientes depositados en el fondo que afloran por las latitudes de estas energías en intercambios verticales.

Para arrancar con un soporte de criterio apropiado a cómo y dónde sacar las muestras, vale que te nutras de imagen satelital de alta resolución y bien contrastada en photoshop.

Recuerda que los sistemas convectivos tienen su advección determinada por un gradiente térmico de ligera menor temperatura. (menor a dos décimas de grado).

De lo contrario, las aguas permanecen disociadas. Harán caminos apareados, pero disociadas. En términos hidroquímicos la cosa no es más sencilla.

Cultivar el ojo termodinámico de sistemas naturales abiertos también reconoce un entrenamiento, que a poco va creciendo para ir dando paso a paso soporte a conceptualización.

Considerando el cariño y los años que llevas en esos ámbitos estimo que estas complicaciones no te van a asustar.

Un abrazo agradecido por acercarme esta información, Francisco, 25/5/15

 

Devolución de Aníbal

QUERIDO FRANCISCO:

Muchísimas gracias por tu apasionante respuesta! Entiendo bien lo que te esmerás en describir desde tu modelación de planicies extremas; porque es algo que repetís en todos tus escritos y no dudo que, con apenas 4mm de pendiente por kilómetro, la hidráulica y las Leyes de Newton, equivalen aquí a querer dividir un átomo con una masa y un cortafierro.  

Pero yo vivo acá sobre el agua y, desde mi absoluta ignorancia, simplemente observo que el agua del río Luján y la del canal de nuestro vecindario, se desplazan durante algunas horas en una dirección, para luego correr en la dirección opuesta, otras tantas horas. Eso suele suceder unas 4 veces por día.

Ahora bien; si ese movimiento fuera sólo superficial, ¿cómo se explica que uno vea subir el nivel del agua en las costas y que tengamos más de 1,5m de amplitud de mareas? Por supuesto que yo no atribuyo este movimiento a otra cosa que el cambio de mareas que se produce por la fuerza de atracción que ejerce la Luna. Eso, en días sin vientos apreciables que cuando aparecen, modifican y vuelven insignificantes estos ciclos de pleamar y bajamar.

Pasando a otro tema:

En el muy cuidado y artesanal movimiento de suelo que hemos realizado, nunca fuimos más profundo que los 2m por debajo del cero IGM. El agua que encontramos al excavar de ese modo, cuando todavía no estábamos abiertos al río ni conectados a ningún curso de agua, siempre fue agua dulce.

En un sector nos topamos con que, antes de alcanzar los -2m IGM, el suelo era tan duro que el balde de la dragalina salía vacío. Entonces paramos ahí, pensando que tal vez habíamos llegado a la tapa del Querandinense; que no debíamos perforar. Pero nunca hemos encontrado agua salobre a esta modesta profundidad…  

Otro dato que resulta interesante y que también proviene del mismo tipo de observaciones empíricas, despojadas por completo de fundamentos teóricos, es la notable proliferación de alisos de río que se produjo, luego de depositar la última capa de tierra excavada a -2m IGM. Al poco tiempo de que esa tierra quedara en la superficie, comenzaron a brotar por todos lados unos arbolitos que parecían cañas de bambú. Una vegetación que no estaba presente en el lugar, antes del movimiento de suelo.

Envié una foto de estos arbolitos a un especialista en botánica y me dijo que eran alisos de río. Una planta de especie nativa. Entonces me puse a pensar, ¿de dónde podían haber aparecido de pronto tantas semillas? Y la única explicación que se me ocurrió, fue que esas semillas debían estar bajo la tierra del humedal; y cuando la dragalina las llevó a la superficie, el aire y el sol las hicieron germinar.

Pero luego pensé que si esas semillas quedaron encima de todo, cuando el balde de la excavadora rascaba la tierra a 2 metros por debajo del cero, en un terreno que cuando empezamos tenía cerca de 1 metro por encima del cero, entonces esas semillas estaban a unos 3 metros bajo la superficie del humedal. Sabiendo que el humedal tarda 500 años en acumular 1 metro de tierra, comprendí que esas semillas habían esperado, en estado latente, unos 1.500 años! La pregunta que me hago sobre este hallazgo, tiene que ver con las características que tenía esta planicie intermareal hace 1.500 años. ¿Acaso era un monte de alisos de río? De ser así, es lógico que no hayamos encontrado agua de mar a esa profundidad. ¿Porque quizás el mar se haya retirado un tiempo antes y sus aguas residuales se han ido filtrando hacia mayores honduras?

¿De dónde vienen esas semillas? ¿O es que los alisos de río, antes fueron alisos de mar y podían vivir en un medio de aguas salobres? No lo creo. Para mí, el agua de mar está más abajo que los 2m bajo cero. Y eso ya era así, hace mil quinientos años.

En cuanto a la calidad de agua que encontramos, la toma siempre es cerca de la superficie del canal. No tengo capacidad para investigar si en distintas profundidades, dentro de los apenas 2 a 3m de agua que solemos tener, la composición cambia bruscamente. Sólo te puedo acercar los análisis de esas tomas superficiales, donde vemos que el agua es muy fácil de potabilizar; con el uso de 3 filtros bien escalonados entre 200 y 0,02 micrones. No se registra más que una notable concentración de hierro. Pero ningún rastro de mercurio, plomo, cromo, zinc, arsénico o cobre.

En estos días juntaré los informes más significativos del laboratorio y te los enviaré en un formato que puedas ver.

Estos datos experimentales que te comparto, con mis interpretaciones simplistas basadas en el más primario sentido común, no pretendo que tengan “el peso de la verdad”. Del mismo modo se llegó a sostener que el Sol giraba alrededor de la Tierra y quemaron a unos cuantos que se atrevieron a decir lo contrario

O sea que las conclusiones de una observación pueden cambiar de acuerdo al observador. Un abrazo!

 

Querido Anibal, paso a responder a Tus inquietudes.

Hace muy pocos años los oceanógrafos han expresado que al menos 2/3 partes de las aguas oceánicas están disociadas. Eso no impide advertir la uniformidad relativa con que se expresan en superficie las mareas. Ver estos html

http://www.alestuariodelplata.com.ar/mareas.html

http://www.alestuariodelplata.com.ar/frentehalino.html

Para comprobar estas disociaciones necesitas medir las diferencias de velocidad, temperatura, carga sedimentaria -por no mencionar otras variables-, que modifican la latitud vertical del proceso convectivo en la columna de agua. Esto nunca se ha hecho, porque nunca quisieron avanzar con estas complicaciones. Simplemente le pusieron nombre: “sistemas verticales turbulentos” y listo. Siguen modelando flujos laminares. Y por cierto, no modelizando sus extrapolaciones “gravitacionales” en laboratorio, porque resulta aún más inviable. Le hacen un saludo a Newton y a su física matemática y resuelto el problema.

 

Respecto a : En un sector nos topamos con que, antes de alcanzar los -2m IGM, el suelo era tan duro que el balde de la dragalina salía vacío. Entonces paramos ahí, pensando que tal vez habíamos llegado a la tapa del Querandinense; que no debíamos perforar. Pero nunca hemos encontrado agua salobre a esta modesta profundidad

 

Estimo Anibal que eso duro es la cresta de un cordón litoral sumergido del sistema de salida del Reconquista, nunca aflorado. Nada que ver con Querandinense. Esos depósitos suelen generar suelos cementados.

Recuerda, que estos cordones marchan aquí transversales a vuestro canal, en secuencias aprox a los 150-180 m. Por ello sería de esperar que si te corres de su eje encuentres de 2,5 a 3 m más abajo, al seno entre cordones (nunca emergido en estos recientes milenios). Allí encontrarás otro tipo de moluscos y suelos más sueltos.

Cuando haces perforaciones transversales al Luján tienes que aprovechar para determinar dónde se ubican estas crestas. Las secuencias, te reitero, se manifiestan aquí en el orden de los 150 a 180 m. Basta con hacer simples cateos de bajo diámetro para ubicar estas secuencias y sus manifestaciones bien contrastadas.

Luego advertir a qué profundidad encuentras el techo y espesor del Querandinense. Estos cateos son sencillos. Pero los tiene que hacer alguien que tenga clara conciencia de estos procesos sedimentarios. Fíjate que todavía no han advertido las razones por las cuales se generan estos cordones de borde custidado. Con el ojo mecánico lo atribuyen a una ola oblicua. Con el termodinámico, a super ordenada precipitación por capa límite térmica.

El tema de la aparición de alisos de río me invita a pensar en pajaritos que fueron a buscar lombrices en esos suelos sueltos y alli defecaron esas semillas de almuerzos previos. Esta misma confusión de floraciones de exóticas es lo que lleva a estimar que las acacias multiplicadas en las riberas del Luján fueran nativas. La cantidad de limpiezas de lecho depositadas en las márgenes son motivo sobrado para que los pajaritos hagan allí sus fiestas.

Si vieras en mis suelos delvicenses en cota 22 m la cantidad de retoños insólitos que generan los pajaritos, no lo creerías. Tengo magnolias grandifloras nacidas en medio de los ladrillos a 150 m de las parientas más cercanas. Azareros criollos por miles en todos lados. Y las semillas no son las que se mueven con el viento. Son grandes y pegajosas. Como si tuvieran un almibar que disfrutan los pajaritos. Las comen, pero no las digieren y defecan las semillas enteritas.

Basta que una bandada de aves se haya entretenido un rato para buscar lombrices en esos suelos recién depositados, para sembrarte todo lo que no imaginas. ¿Viste la cantidad de aves que siguen inmediatas al arado? Así como la pareja de calandrias esperan que termines de almorzar para ir a buscar migajas, así todas las aves se abalanzan sobre los suelos recién removidos.

Respecto del panorama que reconocían esos suelos hace 1500 años, está probado que eran pleno estuario con aguas que hace 2500 años estaban hasta 2 m por encima de las actuales. O sea, bien hasta el borde de la barranca.

3500 años atrás reconocen la última ingresión marina hasta cotas -que por las arcillas hidromórficas verdosas que se rescatan en superficie en cota 7 m en Carabassa- debieron a rozar los 8 m sobre el nivel actual.

El tema de los análisis a 2 y 3 m de profundidad está supeditado a dónde lo hagas: si en el eje del seno o en el eje del cordón custidado. Empieza por ahí si quieres llegar más lejos con los ojos asombrados.

Un abrazo Francisco, 26/5/15